Dos de los arrestados utilizaban una motocicleta prestada para cometer los delitos y estaban armados, mientras que los otros dos forman una pareja.
El 14 de junio, un ladrón con el rostro cubierto ingresó a un maxikiosco en calle Colón al 600, donde, según el cajero, portaba un revólver y robó $80,000 y un teléfono. Después, escapó en una motocicleta 110cc blanca, junto a otro cómplice.
Tres días más tarde, durante la siesta del 17 de junio, el mismo maxikiosco sufrió otro asalto. Un delincuente, también con la cara cubierta, robó $15,000 de la caja registradora y huyó, siempre con el apoyo de otro ladrón en la misma motocicleta.
El tercer robo ocurrió poco después, en otro maxikiosco en calle Uruguay y Lavalle. El atacante entró con el rostro cubierto, forcejeó con la empleada, insinuando que llevaba un arma, y se llevó $5,000 y un celular antes de escapar con un cómplice en motocicleta.
La policía analizó las grabaciones de los robos y logró identificar a los delincuentes como C.M.R., de 33 años, y L.G.G., de 34, quienes fueron arrestados y la motocicleta utilizada en los crímenes fue confiscada. Se supo que el vehículo pertenecía a un amigo de ellos, que estaba de viaje por trabajo en Neuquén.
Otro robo ocurrió en la madrugada del 16 de junio en un maxikiosco en San Martín al 400. Allí, un hombre exigió a la empleada la recaudación y robó $10,000, huyendo junto a una mujer en motocicleta. Tras investigaciones, la policía identificó y detuvo a los delincuentes como J.E.O., de 21 años, y A.B.E., de 18, quienes fueron llevados a la Comisaría Primera.



